¿Dulce o Truco? Quiero mis dulces...

La noche anterior Lawrence se fue diciéndome que tenia que ir a ver unas cosas, no queria aceptar el hecho de que el se fuera y me dejara sola en esta gran habitación, deba vueltas por la cama y tenia mucha hambre, me asome por la ventana y pude ver a pequeños niños disfrazados y corriendo, recuerdo que en una ocasión había salido a buscar dulces con mi hermano mayor, el iba disfrazado de momia y yo de una bruja, eramos conocidos por aventar huevos a las casas de los vecinos que no nos daban dulces, por lo que siempre terminábamos con una montaña enorme, los recuerdos hicieron que me pusiera nostalgica y decidi vestirme, aunque no podia salir a la calle, por lo que tome la capa que habia dejado mi actual amo y me la puse, cubriéndome la cabeza y con ella mis orejas, para despues esconder mi cola dentro de la misma.
Salte por el balcon del hotel y baje de balcon en balcon, dando pequeños saltos y llegando al suelo, una vez que estaba abajo vi a una niña con una bolsa de dulces y recorde que a mi me faltaba una bolsa, por lo que le quite la bolsa a la niña y despues corri, esta se quedo llorando y cuando vi la bolsa estaba casi llena, habia sido buena idea el robarsela, llegue a la casa de una pareja, un hombre musculoso y bien parecido con una mujer algo desmejorada, parecia ser mas grande que el, sonrei y extendi la bolsa y la mujer solo me miro, -Estos dulces son para los niños- me moleste un poco por el comentario de esta mujer y solo mire al hombre, para hacerle unos ojos encantadores, que usualmente usaba para hacer que los hombres hicieran lo que yo queria, el hombre algo engatusado tomo el plato de dulces y me lo dio sonriendo, yo sonrei de vuelta y mire con malicia y satisfaccion a la mujer, supongo que se metio con la chica equivocada, y debe aprender que a mi, ningun hombre podra negarme algo, ningun hombre que no sea mi amo.

Una vez que habia robado los dulces a la pequeña y coqueteado al hombre de la casa anterior, mi bolsa estaba llena, asi que necesitaba una nueva, vi a unos niños comiendo dulces mientras estaban sentados en la calle y me acerque, -Woow... esos dulces se ven deliciosos- los niños sonrieron y me ofrecieron uno, sonrei ante el acto y ante la inocencia de estos niños, simplemente... no me agradaba esa pureza, tome el dulce con mi mano y se lo puse en la boca a un niño, para despues tomar las dos bolsas y huir, ahora tenia tres bolsas de dulces para mi sola y me sentia bien por ello, despues de todo, los dulces siempre me han causado placer, claro, que no tanto como el que me daba mi anterior amo... ese si era placer.
Camine de regreso al hotel con satisfaccion hasta que vi una feliz pareja frente a mi, una chica de cabello negro y un chico pelirojo, simplemente los pelirojos me atraian, pase enmedio de ellos mientras le coqueteaba al hombre quien me miro y comenzo a seguirme, la chica solo se fue enojada y gritandole.
Terminamos en un callejon oscuro, donde yo lo bese y dejaba que el tocara mi cuerpo, no me molestaba, porque al final el tipo cayo al suelo por un golpe y yo tome su billetera, esta habia sido mi noche con suerte, habia recibido dulces y aparte dinero, me fui riendo hasta llegar al balcon mas bajo del hotel y comenzar a saltar de balcon en balcon y llegue a la habitacion en la que me estaba quedando.
Lo primero que hice al llegar fue poner los dulces en la cama, habia una montaña enorme y yo me lance sobre esta mientras reia, despues un papel se colo por mi puerta, arruinando mi momento de felicidad, me quite la capa y saque a la luz mi cola y garras, para atacar a quien fuese necesario, pero cuando abri la puerta no habia nadie detras, azote la puerta por el enojo y levante el papel, que hablaba de una prueba de valor y citaba a magos con potencial, venia con una direccion y decia que buscara a una tal Charlotte, decidida por la diversion que iba a tener mañana me dormi en la montaña de dulces para descansar y estar lista para el dia siguiente.