Encuentro Nocturno Caballero y Princesa

Me encontraba vagando nuevamente por la oscura noche, viendo como nuevamente la luna se reflejaba en las rocas de la ciudad, pero ahora con menos intensidad, la luna se encontraba en estado menguante, iba desapareciendo poco a poco, como mi pobre corazón, iba perdiendo su brillo y su gran esplendor.
Estaba encima de un tejado, cerca de las orillas, de la ciudad, estaba caminando por los tejados y saltando entre estos, aunque era algo peligroso, era lo que mas amaba en estos momentos, era lo que me distraía y me hacia dejar de pensar en aquel doloroso amor, "Ohh~ vida cruel que me atormenta de tal forma... ¿cuanto mas he de pagar por ese pecado? El hombre al que ame con todo mi corazón, me ha traicionado rompiendo en pedazos mi corazon" pronto me encontraba frente al teatro de la ciudad, y recordé mi infancia, y el porque conocí casi todas las ciudades de Fiore, mi madre tenia una ligera obsesión con mi magia, ella me obligaba a ser perfecta y a cantar en contra de mi voluntad, alejándome de mis sueños, de mis metas y de mi amor, aunque ahora era libre, ya no había padres ni compromisos que obstruyeran mi camino, pero ahora me encontraba confundida,  "¿Que debía hacer si no se hacer otra cosa mas que cantar?" Rin apareció alado de mi, abrazo mi mano y agradecí con una sonrisa su gesto por preocuparse por mi, alce mi mirada a la luna, y como un lobo que le aúlla a esta, comencé a cantarle.

Sin moverme de mi sitio, seguí cantando, era así como me desestresaba, era así como liberaba mi corazón, era así como me sentía feliz.

Me encontraba hundida en mi cancion, dejando que me absorba a lo mas profundo de mi ser, sentia como si cayera por un abismo, me encontraba cantando el penultimo cuarteto de la cancion.

-Intente buscar y buscar
la salida de este lugar
tan solo vivi momentos
que nunca olvidare -

Cantandole a la luna, o talvez a mi solitario corazon, eso jamas lo sabre, escuche que una voz me hablaba, estaba a unos pocos metros detras de mi, "¿Quien sera aquel que me salve de esta prision?" deje de cantar y movi mi cuello haciendolo hacia atras para observar quien me acompañaba, pude ver una silueta delgada, con un traje negro y cabello rubio, [center]-¿Como haces para pararte sobre el cielo?- le pregunte mientras veía de cabeza a mi acompañante, hasta que recordé, que el era el segundo rubio que había visto en el gremio, el era el noble caballero, cuando recordé la sangre fue a parar a mis mejillas haciendo que se sonrojaran, regrese mi cuello a su posición normal y me tape el rostro con las manos, "El me había escuchado cantar.... ¡Que pena! Ohh dulce vida, me has puesto frente a mi un noble caballero, ¿sera este el que me salvara de la traición? ¿Sera el quien reconstruirá a mi pobre corazón?" dijo que el lugar era peligroso, me levante y me di la vuelta para mirarlo frente a frente, posando mi mirada en sus suaves ojos, que emitían una mirada profunda.

Cuando quedamos frente a frente, el me miro, sus ojos se posaron en los míos, fue como un sueño, el me extendió la mano para bajar del tejado, cuando senti el tacto mi corazón se comenzó a acelerar cada vez mas... "¿que es esta sensación de que me dará un infarto? ¿Sera acaso que la vida quiere terminar conmigo? Oh~ por favor noble caballero ... no me ilusione... porque si usted se marcha... la muerte me tendrá a su merced." el me dijo que mi voz era hermosa, y que le gusto cuando me presente en el gremio, eso hizo que me sonrojara... ¿acaso había visto cuando me quite la camisa? me sonroje quedando casi tan roja como si de una fresa se tratara... nos sentamos en un banco que estaba por el lugar y lo mire fijamente, tome su rostro con mis manos, curiosa ante la nueva sensación que tenia, emoción, pasión y adrenalina, acerque mi rostro lentamente, con timidez hacia el suyo, para susurrarle al oído-El canto de esta humilde princesa, no se compara con el brillo de este valiente caballero- después, pose mi rostro en su hombro y lo rodeaba en un abrazo.

El me habia contestado dulcemente me habia llamado "My Lady" cosa que hizo que me sonrojara y desviara levemente la mirada, luego el se separo y pude sentir frio de nuevo, lo admito, queria su calor corporal, lo queria cerca de mi, el beso mi mano dulcemente y luego yo tome su mano con las mias, aprisionandola y mirandolo a los ojos, después le sonrei y solte su mano para llevar mis manos a su rostro, que después acerque dulcemente al mio y cuando quedamos a pocos centímetros de distancia me arrepentí... "El puede molestarse conmigo, incluso puede llegar a odiarme" pensé mientras me separaba y lo miraba tímidamente, -Lo siento Noble caballero, no era mi intención incomodarle.... dije mientras admiraba el brillo de sus ojos ante el faro de luz que había cerca, su cabello también tomaba un brillo que lo hacia ver como el oro blanco, ni muy amarillo ni muy blanco, solo ... brillante, como la luz de una estrella, una estrella que estaba salvándome de mi cruel destino.

Cuando me detuve el dijo que no se habia comportado como un caballero y se disculpo, pero ... ¿exactamente porque se disculpaba?  fui yo quien tuvo la culpa, fui yo quien se sintio atraida y queria tener esa hermosa flor, ¿acaso cuando alguien ve una hermosa flor, no es normal quererla tener?, lo queria a el cerca, con el me sentia protegida, "Ya bastantes cosas malas han pasado hoy, mi corazon pareciera que va a colapsar y a destrozarse" aparte la mirada algo sonrojada y pose mi mano en el banco, para que esta fuera cubierta seguidamente por la mano de el, quien cubrio mi mano, protegiéndola de la luz de luna, -Ohh noble caballero, porfavor disculpeme a mi... yo... me deje llevar y no puedo resistirme a su hermoso brillo... a su valentia y a esta cruel atraccion que hara explotar a mi corazon- dije mientras con mi otra mano tocaba su rostro y me acerque, dandole un suave beso en la mejilla, y luego abrazandolo, cuando lo abrace rodee su cuello con mis brazos, mientras refugiaba mi rostro en su cuello, una lagrima traviesa se escapo de mi, resbalandose por mi mejilla como si de una resbaladiza se tratara, necesitaba con fuerza ese abrazo, necesitaba con desesperación estar cerca de el, simplemente, necesitaba protección. -Perdone que haga esto tan derrepente, se que es algo incomodo, perdone también por lo que le voy a decir, pero .... por favor no me suelte.... no me deje en manos de ese tirano... no me obligue a regresar... me aferre con fuerza al caballero que tenia frente a mi, estaba hundida en el miedo, recorde algo que no queria.... algo que hacia que mi felicidad se esfumara....

Sin darme cuenta mi voz se quebró, comenzando a temblar, mi cuerpo le siguió y también temblaba , de frió o de miedo tal vez, el solo imaginarme el verme alado de ese tirano que se llamaba caballero me daba miedo, aun recuerdo cuando este me dijo que me protegería y la ultima ocasión que nos vimos, me intento obligar a hacer cosas pervertidas y cuando me negué me golpeo, por suerte logre escapar, si no, ahorita no sabría que hubiera pasado, me aferre mas al noble caballero que tenia frente a mi, pero en el interior tenia miedo, miedo de que el también mintiera y me hiciera daño, me aleje de el y lo mire a los ojos, como si ahí encontrara la respuesta, como si eso me quitara el miedo de que alguien me dañara...
Aunque el no parecía una mala persona, aun tenia miedo, pero decidí confiar en el noble caballero que tenia frente a mi, le tome el rostro con las manos y le dije -Caballero noble... no quiero que usted apueste su vida, hoy bajo la luz de esta hermosa luna llena, haré un contrato con usted, en el que prometeré, protegerlo cueste lo que cueste y le entregare mi fragmentado corazón- después de decirle eso, me acerque a su rostro y le di un suave beso, donde nuestros labios se juntaron y pude sentir como unas dulces mariposas revoloteaban dentro de mi, la luna nos iluminaba, nos bañaba con su luz y era testigo de esta noche... y de esta promesa.

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Tema terminado