La decisión

La historia de cómo llegó a Fairy Tail:

En la entrada del gremio, estaba Hardrack, todavía indeciso sobre si realmente unirse al gremio de magos o no. Había pasado algunos minutos contemplando el edificio, pues en realidad había llegado por casualidad y dudaba de su decisión final. Podía oír el ruido y el alboroto dentro del gremio, todos celebrando, bebiendo y gritando, muy animados.
"Ha pasado algún tiempo... ¿Todavía siguen celebrando?" Pensaba al escuchar aquel escándalo, haciendo referencia a la victoria en los juegos mágicos. No se dejó llevar por el instinto, que le advertía algo pero ignoraba qué, así que dio un paso al frente y se encaminó a entrar. Apenas estuvo dentro del edificio, varias miradas se posaron sobre él, lo que lo hizo sentir algo incómodo y extrañamente familiar. "Justo como en los viejos tiempos... Llego a un lugar y parece que no encajo." Aunque en sí parecía estar nervioso y tembloroso, no retrocedió, ni dejó que el miedo le dominara. Respiró hondo y continuó hasta llegar a la barra, donde una señorita de cabellos plateados atendía a un hombre de avanzada edad pero a pesar de ello tenía el cabello castaño sin rastro de canas, ambos vieron al extraño y le saludaron cálidamente, sobre todo la peliblanca, con una sonrisa
Pareces nuevo por aquí, ¿vienes a unirte al gremio? Dijo la hermosa chica, lo cuál hizo que Hardrack desviará momentáneamente su mirada, aunque luego la miró a lo ojos cuando respondió: Así es señorita, he venido para unirme a... eh... Fairy Tail. Estaba algo nervioso, aunque lo disimulaba como podía. No mantenía en claro sus pensamientos, salvo la misma pregunta una y otra vez: "¿Estás seguro de ésto?". En su mente, se respondió una sola vez a sí mismo: "Sí, estoy seguro."

Aún así a pesar de tener total confianza en su decisión, al mirar alrededor se preguntaba exactamente si eso era lo que buscaba, si de verdad valía la pena tratar de unirse a un gremio de magos "¿Soy un mago realmente?" Era la pregunta que más le martillaba la cabeza, aunque si de algo estaba seguro es que sus habilidades no eran algo casual, incluso de donde proviene, es algo raro ver a alguien manipular los rayos. "Probablemente no sea el único mago de rayos. De todas formas, parece que este es mi lugar." Al ser cuestionado sobre dónde quería la marca del gremio, tras el hombre de cabello castaño, que se presentó como Gildarts, diera la aprobación, Hardrack le indicó a la chica que la marca estuviera en su pecho, cerca de su cuello, y se abrió la camisa para facilitarle el trabajo. Claro que la chica, quien se identificó como Mirajane, se sorprendió al ver las heridas visibles en el pecho, aunque no hizo preguntas ni antes, durante o después de poner la marca. Simplemente al terminar su tarea, le sonrió y con un cálido "Bienvenido" se oficializó la inclusión al gremio.
-Eso fue... inesperadamente rápido y fácil. Murmuró para sí mismo.